viernes, 12 de septiembre de 2014

En valencia ya es otoño, y no precisamente por el tiempo

Como no me va a enfadar la realidad si lo único que tiene de real es el nombre. Ni las apariencias ni lo que parece que quiere ser es sincero…
Todo gris y negro, todo apariencias, nada se respira real ,nada se respira entero ,puro o sincero..
Nos pasando el día buscando esa chispa de realidad, ese hilo que une con lo real de verdad y deja lo físico a un lado..

Todo polvo y contaminación en una ciudad en la que las apariencias son mas importantes que los sentimientos, donde las sonrisas cortan como cuchillos y las palabras se clavan por ser falsas..

martes, 24 de septiembre de 2013


Por lo visto no estaba suficientemente alcoholizado, azulado y medio drogado el niño  que tenía al lado, tendría que volver a ponerle alguna dosis, en alguna zona de su diminuto cuerpo donde no se notase demasiado la diferencia, mientras que al tiempo se enjugaba las lágrimas y se seguía preguntando como era posible que hubiese llegado a ese lugar.
Mucha gente habla de las mafias de mendigos  pero para los transeúntes es una realidad aparte dominada solo por monedas y bajos “de nada” rodeados por falsas miradas de tristeza, en caso de que las haya, porque la mayoría de veces ni esas, y tampoco es descabellado que sea así, la mendicidad está cada vez más extendida y no solo como fraude.
Recogió sus pocas pertenencias y monedas y salió camino de la estación, misma dirección de siempre, mismo lugar de siempre y misma carga de siempre.
El niño llevaba ya rato sin hacer nada y la carga empezaba a ser demasiado pesada.
Se lo devolvió a su madre, otra mujer que como ella se dedicaba a viajar por las calles en busca de algo que realmente la llenase y no solo los bolsillos. Espero que en sus brazos el niño reencontrase la vida que las drogas suministradas habían callado, esperando que fuese por poco tiempo.
Se fue a su rincón habitual, se echó las manos alrededor de las rodillas y hundió la cabeza en ellas, buscaba desesperadamente una salida a ese tipo de vida, de agobio, de rutina, de no tener que cargar con vidas jóvenes,  la mayoría de ellas perecederas y en muchas ocasiones olvidadas, gente sin rostro ni cara, deseaba desesperadamente poder salir de allí y olvidarlo todo, regresar a algún sitio que pudiese llamar casa.
Aunque antes de llegar a esa situación, en su vida anterior, su realidad no era muy diferente, adicta a otras drogas, otras cargas, otros sitios, y el mismo sentimiento de soledad y frio, y no solo corporal.
“Nadie nos prepara para los fracasos, ni mentales, ni emocionales. Ni nada.
  y por suerte o por desgracia los parches del corazón aun no existen”.
Escribió en un bidón antes de ver como llegaba gus a cobrar lo suyo, como cerraba los ojos de nuevo a una realidad que le agobiaba…

martes, 10 de septiembre de 2013

Nunca he tenido un amigo soga que me ate a la vida, ni una oreja que me acompañe en las noches de melancolia...

miércoles, 10 de julio de 2013

Primer año, primeras experiencias, primer todo

Bueno, pues un verano (prácticamente) después aquí estamos haciendo balance del primer curso, del viaje, la mudanza ,de las primeras experiencias, del primer todo..
Todo el mundo sabe que el politécnico es una universidad con cierto prestigio, cierta calidad, cierto (y mucho) nivel. Nadie me dijo que para conseguir llegar a segundo prácticamente tendrías que sudar sangre por un 5 y pasar noches entre trabajos, exámenes y seamos realistas, muchas muchísimas risas, pero bueno ahí estaba yo, con mi  plaza en ingeniería agroalimentaria, encaminando mi futuro por la parte que más me gustaba: La biología.
Corriendo me fui a casa de Álvaro," el koke ", "el rancio", para enseñarle con ilusión y alevosía mi sms con esas palabras, que estaba admitida y que además íbamos a estar cerca. porque las facultades están bastante cerca en cuanto a metros, pero eso es otro tema, el tema principal es que se va, Álvaro se va(maldito) le desearemos suerte(pero solo por cortesía, eh!).
A las dos semanas ya tenía un trozo de papel que decía ser mi pase para la uni y donde ponía las asignaturas en las que estaba matriculada, sus créditos y demás, y llegaba lo importante;
Hora de encontrar piso. Mi madre me acompañaba (como no), porque yo estaba más perdida que un animal al que acaban de deslumbrar.  Vimos cosa de 7 pisos, hasta que encontré el perfecto, grande, poco luminoso, lejos de la uni, pero con una gran terraza…

¡y además tenía gato!. Siendo francos yo me quede por el gato, para que mentir (Que sepáis que al final nos queríamos y todo, y tuvo gatitos por fallas. Todos monísimos (obviamente))

Al principio salía del cuarto por que no podía soportar más que me hacía pis, que tenía hambre o porque necesitaba algo de contacto humano, cualquiera que me conozca un poco sabrá que soy de lo más tímido que se puede encontrar y encontrarme con las personas que iban a ser ahora mi familia durante el curso me ponía los pelos de punta, y me costaba, para que negarlo.

Pero bueno, poco a poco (muy poco a poco) fui saliendo del cuarto y la relación fue mejorando, tanto que la primera fiesta (oficial) que me pegue el 21 de octubre  fue con ellos para celebrar que pasaba de los 18 a los feos 19. Una noche completa la recuerde por donde la recuerde.
A la vez  también iba pasando el tiempo en la uni, el primer día fue horrible gente que choca con gente y miedo contra miedo, nadie sabía dónde estaba nada y todo el mundo tenía miedo de un sitio tan grande, solo, y con gente que le preguntabas donde esta”… “y te miraba con cara de “tú eres tonto o que pasa” pero en fin.
 Luche como si dieran oro para conseguir un calendario de la upv (eso sí, de todos los tamaños) y conocí a las primeras personas de mi carrera. Siempre recordare que tanto Eligia como yo íbamos perdidisimas con Física, por no saber no sabíamos ni donde estaba la clase. Después ya fueron apareciendo Elvira, Baruc, juan, marina, queen, David…y poco a poco también, como en la casa la confianza y los amigos iban creciendo, aun que como estos, los primeros, ningunos.
Las clases no iban mal y poco a poco te ibas haciendo con los horarios, las prácticas de química  aquí, las de biología allá, de tal hora a tal hora esto, no hay tiempo de comer, bocata y para clase…y así fue pasando hasta navidades. Despedirse de la gente a la que acababas de conocer, estudiar para los finales, trabajos, transecto, fiestas (porque si, también las habían), recoger esto, ordenar lo otro y también había tiempo para liarla (si, tuve un percance con un bocadillo y la cara de alguien, y el chocolate y yo no nos llevamos bien, no)
Después de navidades tocaban las recuperaciones, física al hoyo después de un examen horrible y el tiempo más desperdiciado de toda mi vida. Y también había que enfrentarse al terrible examen de geología y la entrega de su también pesado trabajo, pero bueno al menos después de todo se supero, esa ya está fuera.
Tocaba volverse a adaptar a nuevos profesores, nuevas asignaturas, nuevos despachos, departamentos… y siendo sinceros, de esa segunda parte del año pocas asignaturas me parecían superables, dibujo era como tirarse aceite hirviendo y ahí se ha visto el resultado
(Queda claro entonces que llevo dos asignaturas de primero, no?)
Después de navidades vino minerva ahí por el 15 de Enero, me llevo a que mi mente se culturizase un poco viendo fotos de guerra e historias escalofriantes, cumpleaños, tarta y quintos. Llevarla a clase cual mono de feria y que hasta el profesor se girase al verla en clase.
Ese fin de semana fiestas de sax, la típica borrachera, la visita de Rosa y María y por qué no, uno de los mejores fin des de mi vida, y ese lunes como buenos universitarios Álvaro y yo camino de Valencia, de prácticas y de todas esas cosas bonitas.

En la casa por su lado las cosas también estaban caldeadas, no es oro todo lo que reluce y eso lo he podido comprobar en mis propias carnes, siempre me ha gustado decir las verdades a la cara y me limitare a decir que eso fue lo que hice. cuyo resultado fue que fuésemos uno menos en la casa algo antes de fallas, que… por aquel  entonces FALLAS, FALLAS. Visitas de pascual, minerva, ir a la estación, ir a comer aquí y allá, encienden las luces aquí, vámonos de quintos allá, ahora esto y mañana el rockafalles a carca cenamos con marina y David y a las 11 estamos viendo al primer grupo.




 La pegatina actuó de forma espectacular como siempre y sus pogos tienen fama de ser los mejores..¡ y con razón!, congelación a la hora de esperar el tren y después camino de la estación para dejar a minerva y pascual, y ahí acabo otro de los fines de semana más épicos del curso, maravilloso, tanto por la compañía(se vino nat,una de mis compañeras :D) como los grupos, el ambiente, todo.
En fallas, mascletaes, comidas por la calle,  la primera noche salida con los compañeros y vuelta a casa pronto que al día siguiente venían los papas y había que aparentar cierta lucidez.
Churros en la estación y a ver fallas, agobio, mucha gente y mucha fiesta, increíble..



Y mokote(la gata de la casa) tuvo sus mokotillos.



Y nada, así hasta pascua, que  todo paso de forma normal y tranquila; exámenes, quintos, series, exámenes, prácticas, alguna peli, alguna fiesta y más exámenes..
Las pascuas ni las pude oler, los exámenes estaban demasiado cerca y ya no podía vaguear más salir un poco para despejarse y a estudiar, sufrir con dibujo, clases divertidas, cada vez mejor ambiente, mejor humor, más noches sin dormir y como no más exámenes y trabajos.
Y entre tanto mudanzas, buscar piso nuevo, o compañero nuevo, no aparecen, hay que seguir buscando y “ y ahora qué”, ”y qué vamos a hacer”, aun que como dicen, no hay mal que cien años dure .Así que después de andar mucho, de muchos paseos, de muchas casas, dimos con la perfecta, la mudanza la hicimos en un día lluvioso(por si no teníamos mala suerte) y de frío, y al día siguiente había examen!. Pero al final todo bien, y el examen aprobado y todo
El tiempo pasaba volando y ya estábamos a finales de mayo jugándonos todo el curso, que si ahora física, que si química también es difícil, que si hay que dedicarle tiempo a climatología, que si también se acerca la recuperación de geología y hay exámenes de Matemáticas II.
La biblioteca era prácticamente nuestra segunda casa y bellas artes nuestra cocina.
Hasta que por fin terminamos con todo y como no, nos fuimos de fiesta, alcohol, declaraciones y sorpresas, vamos, noches de esas que no se olvidan fácilmente.
Y ahora, poco después de eso de vacaciones, dormir mucho, esperar para volver a valencia y salir más, esperar las notas y prepararse para los festivales que madre mia…
Vendería mi alma al diablo por una entrada al Dcode!, pero bueno, veré al guapito de Franz sentada y resignada en el sillón.
Y hasta aquí la crónica del primer año en valencia, de las primeras experiencias, del primer todo..
Subiré más entradas (cuando le quite el polvo a todo esto) sobre los momentos más importantes, o notas, o cosas que se me pasen por la cabeza ;como miau,miau,miau, aunque tenga fallos y falta de costumbre a la hora de escribir asiduamente en un blog 

martes, 9 de julio de 2013

Era de madrugada, o al menos eso creía, su vida era un insomnio constante, siesta tras siesta, y desvelo tras desvelo.
Ya soñaba con la realidad, o con lo que el creía que era la realidad, las mismas caras, los mismos personajes, las mismas frases y los mismos finales.
Miro el reloj y marcaba las 3, siempre las 3, ya no sabia si el reloj estaba sin pila o realmente lo llamaba el ser oscuro de su interior, por lo menos eso parecía.
Vio el bote de pastillas contra el insomnio y no pudo evitar colocarse tres grageas en la boca.
A cualquier persona normal una dosis tan alta, como mínimo le hubiese causado una importante intoxicación, pero para alguien como el, no significaba mas que quizás una hora o dos más de sueño, de pesadillas o lo que fuese, pero de al menos un rato de descanso.
Abrió los ojos al rato;  las 5:30, "bueno, algo es algo" se dijo.
 Bajo sus hinchados y  pesados pies al suelo,miro la habitación carcomida por la suciedad, el moho y los recuerdos.
Su esposa hacia meses, o quizás años que lo había abandonado, llevándose con ella a sus hijos, el poco dinero que tenia, el coche y el perro, y toda la luz que había en la casa, que no era mucha precisamente, pero si más de la que había ahora.
Bajo a la cocina, allí, frente a la pared, colgada en el frigorífico una foto de su familia, todos arreglados, tan felices, tan, tan.. perfectos.
Las fotografías tienen el don de mostrar las cosas que nunca existieron, y aquella tenia el poder de hacer que añorase una felicidad que nunca había existido, pero que en su superficie si se veía reflejada...
Estaba consternado, pero la vida no espera  a nadie, le puso de comer a los dos peces de su hija, lo único que le quedaba de ella. no podía verla, no podía llamarlos, no podía nada..
Hacia unos años, cuando su esposa aun estaba a su lado era alcohólico, o al menos recordaba mucho alcohol a su alrededor , muchas desilusiones, muchas decepciones..
Aun que lo cierto es que su mente no conseguía recordar nada más, no podía .
Tantas noches en vela, tantas pastillas le estaban destrozando el cerebro, la visión de la realidad, todo.
A veces ponía la televisión para intentar acercarse un poco a la realidad, pero las imagenes que le devolvía el televisor eran demasiado turbias, sin sentido, sin color 
 Se dispuesto a ir al bar donde trabajaba, un lugar cuanto más sencillo, donde la gente para cuando esta de camino entre un sitio y otro para tomar el típico café aguado, porque a esa cosa no se le puede llamar café, y también tortitas.
Billy le saludo como siempre, de forma tosca, sin mirarle a los ojos, ni a los pies ni a ninguna de sus extremidades. Pero bueno, a él no le importo y entro dentro, a la cocina, dispuesto a su tarea; fregar, limpiar y aguantar gritos e insultos.
Después de las 10h de trabajo obligarías diarias, se fue a casa, a seguir con su ritual de noches en vela y tristeza acumulada en unos ojos que nunca se cierran..
Hasta que esa mañana, después de sus 3 pastillas para dormir, si no habían sido más, ya no lo recordaba, le costaba cada vez más recordar sus dosis de pequeña desconexión, cuando se dio cuenta de que el reloj seguía marcando las 3. "Sí, definitivamente ese cacharro estaba estropeado", porque brillaba la luz del sol fuera, pero lo curioso es que no había nadie por la calle, nadie en el trabajo, es como si todo el mundo hubiese desaparecido, como si estuviese encerrado en una bola de cristal sin salida y más o menos era algo así, pero más escalofriante..


Otro día seguiré con esta historia, que, creo que ya se estaba haciendo demasiado pesada para  seguir alargandola. 

martes, 19 de febrero de 2013

Necesito algo que me haga ver que vale la pena seguir preguntarndome si vale la pena..

lunes, 31 de diciembre de 2012

Al 2013 no le pido nada raro, ni que sea mejor ni peor solo intenso,muy intenso. Un año que valga la pena recordar. Y a poder ser con más amor del que hay, no solo personal por supuesto.